He oído tanto hablar de la necesidad de ser “RESPONSABLE” para tener un hijo que muchas veces, y seguro que si alguno tiene hijos me dará la razón, pensaríamos un poco antes esto de traer más gente al mundo a nuestro cargo.
Te pasas la vida aprendiendo y asimilando conceptos, ideas y comportamientos. Cuando eres niño, te debes a la única obligación de aprender, y además esto te lo repiten constantemente padres y maestros, y claro, piensas, “-algún día esto se acabará, lo habré aprendido todo y podré ser un hijo modelo-”, y casi cuando ya se está acabando ese aprendizaje te das cuenta que tu reloj de paternidad está llamando a la puerta y ya te toca empezar a ser tú el que enseña, el que es padre, y vuelta a empezar a ser responsable, pero ahora al revés, y nuevamente piensas que alguna vez terminarás de ser responsable de toda esta historia de aprendizajes y enseñamientos, pero esto nunca acaba porque de repente tus hijos pequeños se han convertido en hijos adolescentes, y a partir de ahora nada de lo que sabias sobre paternidad sirve, porque el tratamiento de un hijo adolescente es como caminar por un puente muy estrecho, sin barandillas, con un precipicio a cada lado, es decir haciendo auténticos malabarismos para no caer. Enseñar y ser padre responsable con un adolescente significa ser un poco hijo (buscar atajos a las normas) y ser un poco padre (marcar los caminos, es decir, las normas).
Los hijos, aunque la mayoría tendemos a pensar lo contrario, no son patrimonio personal de los padres, hay que alimentarles físicamente, (eso es una obligación, tipificada en la constitución), y hay que alimentarles psicológicamente, (eso también debería ser una obligación), no hay que darle ideas, hay que ofrecerle herramientas para que algún día tenga las suyas propias, no deberíamos decirle que tiene que ser responsable, si no dejarle que vea como puede serlo y creo que eso cada uno de nosotros sabe cómo hacerlo.
En fin, creo que ser hijo, ser padre, y ser responsable es una mezcla homogénea, que no es tan difícil, y que si se lleva bien, al final esto de la PATERNIDAD RESPONSABLE puede ser un episodio en nuestra vida que nos dejará una huella imborrable, pero que la mayoría deseamos tener, probar y, porque no decirlo, disfrutar en nuestra vida.
Claro esta que la paternidad va ligado con la responsabilidad, responsabilidad que parte de la población elude de forma sistematica ,lo vemos cada dia y hace que nos planteemos la siguiente pregunta ¿ Deberia existir unas normas para poder ser padres ?¿ todo el mundo es apto?preguntas que cada uno deberia de responderse el mismo pero es una prueba mas que nos da la propia vida
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